Introducción al Monociclo por Kris Holm

Para muchas personas, aprender a montar en monociclo les produce una gran sensación de superación, ya que al principio parece imposible, pero con un poco de persistencia llega a ser totalmente factible. Jóvenes o viejos, cualquier persona puede aprender y es más fácil de lo que la mayoría de la gente piensa. Si eres nuevo en este deporte, aquí tienes algunos consejos para empezar:

  • Busca un buen lugar para practicar - lo ideal es una superficie lisa y plana junto a una cerca donde apoyarse, o una pared con una barandilla y nada más alrededor con lo que hacerte daño en caso de una caída. Evita el césped, grava, alfombras u otras superficies irregulares - ya tendrás tiempo de sobra cuando montes por la montaña con el monociclo.

  • Pon el monociclo entre las piernas y sujeta la parte delantera del sillín con una mano. Decide cuál es tu pie dominante, el pie que quieres poner en el pedal en primer lugar. A menudo, esto está relacionado con ser zurdo o diestro, pero no siempre. Desplaza tu peso a un lado de tal forma que puedas levantar el pie dominante.

  • Orienta los pedales de tal forma que el pedal en el que quieres pisar se encuentre en la parte trasera, ligeramente inferior a la horizontal. Pon tu pie dominante en el pedal de forma que el pedal quede centrado bajo tu pie. Ahora sujeta el agarre con una o ambas manos, y sube al monociclo, siéntate con la espalda recta, sitúa alrededor del 80% de tu peso en el sillín. ¡Al principio te sentirás muy inestable!

  • Oscila hacia atrás y adelante, para hacerte una idea de cómo cambia el equilibrio con las diferentes posiciones de las bielas. Tendrás el máximo control cuando las bielas estén horizontales y menos control cuando las bielas estén verticales. Comprueba la altura del sillín - de tal forma que tus piernas estén ligeramente dobladas cuando el pedal se sitúa en la parte inferior - asegúrate de que la rueda esté suficientemente inflada para evitar las resistencias indebidas al girar. Mira el suelo un poco más adelante, inclínate ligeramente hacia adelante y empieza a pedalear. Mantén la suficiente velocidad para poder superar la posición vertical de las bielas. Apóyate lo menos posible, soltándote un poco a medida que te sientas más cómodo.

  • Cuando estés listo monta sin ningún tipo de ayuda. Mira hacia dónde quieres ir, no a tus pies. Mantén los brazos extendidos, con buen tono muscular, pero no tenso. Si te caes no intentes coger el monociclo a menos que estés seguro de que puedes hacerlo sin peligro. Repite esto una y otra vez hasta que seas capaz de andar en línea recta. Sobre todo, tendrás que ser paciente. Para lograr esto puedes necesitar 10 o 20 horas de práctica, algunos necesitan incluso más. Para la mayoría, los primeros pasos del aprendizaje es lo más difícil de conseguir, pero con el tiempo te preguntarás por qué te parecía tan difícil al principio.